Sudáfrica, 1901. Tres lugartenientes australianos son sometidos a un consejo de guerra por asesinato. El oficial encargado del proceso lee las notas preliminares que implican a Harry Harbord ‘Breaker’ Morant, George Witton y Peter Handcock de la muerte de un misionero alemán y de varios prisioneros Boer confinados en una prisión custodiada por el ejército inglés. El oficial defensor, el Comandante Thomas, entiende que el proceso presenta ciertas irregularidades.